Escuelas felices: educación positiva

¿Has intentado incluir la felicidad en tu clases?

Esto es posible por medio de la educación positiva, una práctica educativa que busca mejorar la calidad de la educación, considerando todo lo que hace feliz a cada uno de nosotros.

Al promover la educación positiva se desarrolla el bienestar integral que busca generar confianza, perseverancia, entusiasmo, gratitud y autoestima en ti y en tus alumnos.

Se apoya principalmente en las herramientas para la felicidad, como trabajar en la resiliencia de tus alumnos con ejemplos y retos alcanzables a su edad, impulsar la resolución de problemas y toma de decisiones o impulsar el asertividad en ellos.

¿Cómo surge?

La educación positiva tiene su origen en la psicologí­a positiva. Martin Seligman es quien desarrolló esta forma de pensamiento y busca incluir la felicidad en la educación. Esta tendencia utiliza cualquier aspecto que promueva el bienestar de tus alumnos, centrando el desarrollo de emociones agradables y convirtiéndolas en fortalezas.

¿Cómo puedo promoverla en clase?

Ahora que lo sabes, genera experiencias positivas en tus alumnos para impulsar en ellos la confianza, autoestima, aceptación y la felicidad. 

• Realiza ejercicios de Mindfulness o atención plena.
• Desarrolla la creatividad
• Convierte sus fortalezas en su mejor escudo.
• Reconoce sus motivos de felicidad
• Practica la gratitud con tus alumnos.

No lo olvides:

• La educación positiva ayuda a hacer de la vida algo significativo, disfrutar el momento presente y convertir la felicidad en el centro de la formación de tus alumnos.
• Brinda a tus alumnos momentos memorables y hacer de su aprendizaje una herramienta para su vida para enfrentar nuevos retos todos los dí­as.
• Tu tienes el poder de potenciar sus talentos y la felicidad es de los mejores aliados para hacerlo.